Damasco.- Helicópteros del régimen sirio lanzaron barriles con gas cloro en la provincia de Idlib, en el noroeste del país, controlada en gran parte por los rebeldes, causando la muerte de un niño y asfixia a unos 40 civiles, reportaron activistas sirios.
El grupo Defensa Civil Siria difundió un video donde muestra cómo los paramédicos y vecinos llevan niños en estado de shock a un hospital, algunos de ellos tosiendo y otros llevando máscaras de gas, reportó este domingo la cadena Al Yazira.
Según los médicos, el gas que había en los barriles era ciertamente cloro, indicó por su parte el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Londres, pero que dispone una amplia red de activistas, médicos y militares en Siria.
El OSDH precisó que el ataque con ese tóxico ocurrió la mañana del sábado en las localidades de Saraqeb y Nairab, en la provincia de Idlib, donde un niño falleció.
En marzo pasado, Human Rights Watch (HRW) acusó al régimen de Bashar al-Assad de haber lanzado barriles con gas cloro en sectores rebeldes de Idlib, causando la muerte de seis miembros de una misma familia, entre ellos seis niños.
Un mes después, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas recibió testimonios directos de médicos sobre ataques con este elemento en localidades de Idlib.
La Organización para la Prohibición de Armas Químicas anunció la víspera que está dispuesta a enviar un equipo para investigar las diversas denuncias de ataques con cloro, pero para ello se requiere la aprobación del régimen sirio.
Aparte de los ataques por parte del régimen sirio, los civiles son abatidos por error por los bombardeos de la coalición internacional, encabezada por Estados Unidos, que lanza sus ataques aéreos contra posiciones del yihadista Estado Islámico (EI).
El OSDH denunció la víspera la muerte de al menos 52 civiles, incluidos siete menores, así como la desaparición de otras 13 personas en la aldea de Bir Mahali, en la norteña provincia siria de Alepo.
Las víctimas, que pertenecían a seis familias diferentes, perdieron la vida en un bombardeo ocurrido entre la noche del jueves y la madrugada del viernes pasado.
“Está claro que hubo errores en las informaciones recogidas para lanzar el ataque”, dijo el director del OSDH, Rami Rami Abdul Rahman, quien pidió una investigación sobre lo ocurrido y que los responsables sean juzgados.