Washington.- Los demócratas del Senado se rebelaron hoy contra la política comercial del presidente Barack Obama y bloquearon un voto procedimental para la renovación de la “”Vía Rápida” necesaria para completar la Alianza Transpacífica (TPP).
Con una votación de 52 a 45, los partidarios de la Autoridad de Promoción Comercial se quedaron ocho votos cortos de los 60 reglamentarios para poner fin al debate y llevar la iniciativa a votación final.
Las negociaciones de la Alianza Transpacífica (TPP) incluyen a Australia, Brunei, Canadá, Chile, Japón, Malaysia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur, Estados Unidos y Vietnam.
“Lo que acabamos de ver es muy desconcertante”, proclamó desde la tribuna el líder de la mayoría republicana Mitch McConnell. “Todos debemos hacer una pausa para respirar y buscar la manera de avanzar”, respondió el líder de los demócratas Harry Reid.
El desenlace del voto de procedimiento fue visto como un duro golpe para la Casa Blanca toda vez que el presidente había lanzado en las últimas semanas una ofensiva de apariciones públicas para defender la importancia de la apertura de mercados.
Obama se enfrascó en los últimos días en un acalorado intercambio público con algunos de los más prominentes miembros de su propio Partido Demócrata, incluida la senadora Elizabeth Warren, quien emplazó al presidente a hacer públicas las negociaciones de la TPP.
Al final, algunos de los mayores aliados políticos del presidente en temas como migración, incluidos los senadores Reid, Dick Durbin y Charles Schumer, votaron contra la iniciativa de la Casa Blanca.
Los demócratas habían condicionado su voto a la inclusión de iniciativas paralelas que cubrieran temas como un acuerdo aduanal para enfrentar el problema de manipulación de divisas entre los miembros de la TPP, así como una iniciativa de ley de Asistencia de Ajuste Comercial.
En apoyo de los demócratas, los mayores sindicatos de Estados Unidos, incluida la AFL-CIO mantuvieron en las últimas semanas campañas en oposición a la TPP.
La “Vía Rápida” o “Autoridad de Promoción Comercial” (TPA) permite al ejecutivo negociar pactos con otros países o con grupos de países, sin la injerencia del legislativo, que sólo puede votar a favor o en contra del producto final.
Sin embargo, la autoridad comercial expiró en 2007 durante el gobierno del presidente George W Bush sin que haya sido renovada por el Congreso.
El mecanismo ha sido utilizado por los sucesivos gobiernos estadunidenses para negociar acuerdos regionales, como el tratado de Libre Comercio de América (TLCAN) o bilaterales como los suscritos con Colombia, Panamá, Canadá o Israel.
Al igual que lo ocurrido en 1993 con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), cuando el presidente William Clinton promovió el acuerdo, pese a la oposición de miembros de su partido demócrata, Obama enfrentó un rechazo similar contra la renovación de la Vía Rápida.
Clinton logró la aprobación del TLCAN con 132 votos republicanos y 102 demócratas.
Un análisis oficial muestra que el valor de las exportaciones de bienes y servicios de Estados Unidos ascendió a 2.3 billones (millones de millones de dólares) en 2014, un aumento de 102 por ciento en relación con 2004.
Las exportaciones estadunidenses de bienes y servicios por parte de más de 300 mil empresas respaldaron la creación o permanencia de 11.7 millones de empleos, en especial entre pequeños y medianos negocios.
Los republicanos tienen la opción de presentar nuevamente en el pleno del Senado la iniciativa de renovación en las próximas semanas, pero expertos coinciden que existe una oposición similar de los demócratas en la Cámara de Representantes.