La Habana.- Cuba y Estados Unidos discreparon hoy aquí sobre la Ley de Ajuste cubano de 1966 y la política de “pies secos-pies mojados” al celebrar la 28 ronda de conversaciones migratorias en esta capital.
El subsecretario adjunto para Latinoamérica del Departamento de Estado, Edward Alex Lee, dijo en rueda de prensa que la Ley de Ajuste cubano “seguirá guiando” la política migratoria con respecto a Cuba, y que también se mantendrá la política “pies secos-pies mojados”.
Esta última definición significa que los emigrantes ilegales cubanos que logren pisar territorio estadunidenses sin ser detenidos por guardacostas de ese país podrán permanecer y obtener residencia en Estados Unidos.
Pero en un encuentro posterior con periodistas, la directora general de la Dirección de Estados Unidos de la Cancillería cubana, Josefina Vidal, aseguró que la Ley de Ajuste Cubano y la política “pies secos-pies mojados” es el principal estímulo para la emigración ilegal de Cuba hacia Estados Unidos.
Estas fueron las primeras conversaciones migratorias entre La Habana y Washington después del histórico anuncio de los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, sobre la disposición de normalizar las relaciones bilaterales.
Pese a ese diferendo, ambos funcionarios reconocieron avances en varios temas migratorios, tras concluir la ronda sobre este tema, antesala del examen este jueves de la reanudación de relaciones diplomáticas entre los dos viejos adversarios de la Guerra Fria.
Los dos diplomáticos dijeron que en el encuentro a puertas cerradas, en el capitalino Palacio de Convenciones, ambas delegaciones reiteraron el compromiso expresado en los acuerdos migratorios, de asegurar una emigración “legal, segura y ordenada”.
Lee calificó las conversaciones de este miércoles de productivas y resaltó el “espíritu de colaboración”, a pesar de diferencias que podrán abordar en otras oportunidades.
En su opinión, estas pláticas reflejan el nuevo énfasis en el diálogo, y que aún con diferencias, se pueden encontrar oportunidades para trabajar en temas de interés mutuo y seguir “un intercambio respetuoso y profundo”.
Lee señaló que ambas partes analizaron este miércoles el asunto de los llamados “excluibles”, como se califica a un grupo de ciudadanos cubanos que el gobierno de Estados Unidos desea repatriar a Cuba.
Vidal, por su parte, se quejó que la Ley de Ajuste también alienta el tráfico de personas, el fraude de documentos para entrar ilegalmente a Estados Unidos y a las entradas irregulares a ese país a través de terceros, por parte de cubanos que viajan legalmente al exterior.
La funcionaria cubana admitió que en el caso de tal normativa, solo el Congreso puede cambiarla, pero el gobierno del presidente Barack Obama tiene potestad para pronunciarse sobre la manera en que se implementa esa ley.
Vidal se reunirá este jueves con la secretaria asistente de Estado para los Asuntos del Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, para abordar el tema del restablecimiento de relaciones diplomáticas y la apertura de embajadas en los respectivos países.
Elogió el clima “respetuoso y constructivo” del diálogo en el cual citó progresos como el respeto al compromiso asumido por Estados Unidos en los acuerdos migratorios, de otorgar no menos de 20 mil visas anualmente a migrantes cubanos, y visas para visitas temporales.
Sin embargo, rechazó la continuidad de la política dirigida a alentar a profesionales y técnicos cubanos de la salud a abandonar sus misiones en terceros países, lo que en su criterio es una “práctica censurable de robo de cerebros”.