Nueva York.- El conflicto en Siria, que este mes cumple cuatro año de haber iniciado, ha extinguido 83 por ciento de la iluminación total de ese país, de acuerdo con imágenes satelitales que muestran el grado de devastación provocado por la violencia.
Difundidas este jueves por una coalición de grupos civiles, las imágenes satelitales fueron acompañadas por una petición a la comunidad internacional para que detenga la violencia en Siria, dando prioridad a una solución política que frene la masacre de civiles.
“Tomadas a 500 millas (800 kilómetros) sobre la superficie terrestre, estas imágenes nos ayudan a entender el sufrimiento y miedo experimentados por los sirios ordinarios cada día, mientras su país es destruido a su alrededor”, dijo Xi Li, investigador a cargo del proyecto.
Destacó que las imágenes muestran, por ejemplo, que la luz se ha extinguido en 97 por ciento de la ciudad de Alepo, en tanto que zonas urbanas como la capital Damasco y Quneitra, cerca de la frontera con Israel, son la excepción: con 35 y 47 por ciento, respectivamente, de su fluido eléctrico inoperante.
“Cuatro años desde el inicio de la crisis, el pueblo de Siria ha sido lanzado a la oscuridad: destituidos, temerosos y en duelo por los amigos que han perdido en el país que alguna vez conocieron”, dijo David Miliband, presidente y director del Comité Internacional de Rescate.
Afirmó que tras cuatro años de crisis, que han causado la muerte de por lo menos 200 mil personas y más de 11 millones de desplazados, los civiles de Siria merecen una mejor respuesta de la comunidad internacional, que debe trabajar con ellos para recuperar su país y su iluminación.
La coalición de grupos civiles lamentó además que pese a que en 2014 el Consejo de Seguridad de la ONU adoptara tres resoluciones que exigen proteger la asistencia para civiles en Siria, miles de personas hayan muerto y muchas más hayan sido desplazadas o requieran de ayuda para subsistir.
Jan Egeland, secretario general del Consejo Noruego para los Refugiados, apuntó que 2014 ha sido el años más negro de la guerra civil en Siria, y que resulta indignante la manera en que la comunidad internacional ha fallado en su respuesta a la población de ese país.
“Los civiles no están protegidos como el Consejo de Seguridad prometió hacer, su acceso a asistencia no ha mejorado y el fondeo humanitario está en declive en comparación con las necesidades”, criticó Egeland.
En otra medida del grado de la devastación de Siria, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) asentó este jueves que unos 14 millones de niños sirios sufren actualmente las consecuencias del conflicto.
Resaltó que unos 5.6 millones de infantes se encuentran en la más desesperada situación, lo que incluye a dos millones de niños que radican en áreas de difícil acceso para la asistencia humanitaria debido al conflicto y a otros factores. Unos 2.6 millones de menores, además, no acuden a la escuela.
“Para los niños más jóvenes, esta crisis es todo lo que han conocido. Para los adolescentes entrando a sus años formativos, la violencia y sufrimiento no sólo han marcado su pasado, sino que está moldeando su futuro”, aseguró Anthony Lake, director ejecutivo de Unicef.