Santa Cruz de la Sierra.- El regalo del presidente de Bolivia, Evo Morales, al Papa de una cruz con un Cristo tallado sobre una hoz y un martillo, emblemas del comunismo, levantó polémica en el segundo día de visita de Francisco al país sudamericano.
El obsequio fue entregado por el mandatario durante la audiencia que ambos tuvieron la víspera en el Palacio Presidencial de La Paz. Según confirmó el portavoz del Vaticano, ni el pontífice, ni sus colaboradores sabían de este obsequio.
“No estaba previsto por el Papa esto, eso es claro y el tampoco tuvo particulares expresiones al recibirla. Tampoco me pidió que manifestase públicamente alguna reacción específica o negativa al respecto”, señaló Federico Lombardi, en declaraciones a la prensa.
Lo cierto es que las imágenes de televisión registraron el momento en la entrega del presente y en el mismo Bergoglio no parece muy entusiasmado, más bien pone cara de sorpresa y perplejidad ante el gesto.
Algunos sitios web católicos lograron identificar, en audio poco claro del momento, una reacción instintiva del Papa que interrumpió a Morales con la frase: “Eso no está bien”.
Lombardi no quiso confirmar la veracidad de esas palabras, argumentando que nadie sabe bien qué decían ambos en ese momento por la deficiencia técnica del audio.
“Es una cruz que fue diseñada por Espinal, no fue creada después o ahora, porque Espinal tenía un sentido de actitud de diálogo muy abierto con todos, no era una interpretación ideológica específica. Pero era algo que él ha diseñado”, añadió.
De esa manera hizo referencia al sacerdote jesuita Luis Espinal, poeta y cineasta, luchador por los derechos humanos asesinado en marzo de 1980 por su compromiso social y al cual Francisco rindió homenaje poco antes de reunirse con el presidente boliviano, la tarde del miércoles.
A bordo del papamóvil que lo condujo del aeropuerto de El Alto a La Paz, el Papa hizo una breve parada en el lugar donde el cuerpo torturado y sin vida del sacerdote fue encontrado, allí dijo unas palabras y bendijo a la multitud.
Aseguró que Espinal fue asesinado por predicar la liberación del evangelio y porque sus enseñanzas se volvieron incómodas para ciertos intereses que no querían que se luchara por la libertad en Bolivia.
Lombardi confirmó que esa cruz con la hoz y el martillo fue diseñada originalmente por el jesuita pero insistió que su intención era “de un diálogo amplio” y, por eso, “no puede dársele una interpretación ideológica específica” a la imagen.
“No muchas personas conocían esta obra, ninguno la conocía, no fue algo muy utilizado y difundido por Espinal, no era un símbolo. En este sentido se puede discutir sobre su significado y el uso de este símbolo ahora, pero su origen fue el padre”, apuntó.
Justificó que el Papa no sabía nada del regalo porque este estaba vinculado a la “Orden Espinal”, que le fue conferida a Francisco sin que él supiese porque tiene como política personal no recibir condecoraciones de ninguna clase.
En cambio, Morales le impuso dos condecoraciones, el “Cóndor de los Andes” y la “Orden Espinal”, esta última de reciente creación.