La Haya.- La Corte Internacional de Justicia (CIJ) absolvió hoy a Serbia y Croacia de genocidio cometido durante la guerra que llevó a la desintegración de la República Federal Yugoslava (RFY) en la década de 1990.
El máximo tribunal de las Naciones Unidas (ONU), con sede en esta ciudad holandesa, determinó que ni Serbia ni Croacia cometieron crímenes de genocidio contra la población durante la guerra de la antigua Yugoslavia entre 1991 y 1995.
En el veredicto a la acusación de genocidio presentada por Croacia contra Serbia en la Corte, el presidente de la CIJ, Peter Tomka, indicó que aunque las fuerzas de ambos países habían cometido crímenes durante el conflicto, ninguna tuvo la intención de cometer genocidio.
El 2 de julio de 1999, el gobierno de Croacia acudió a la Corte Internacional para acusar a la RFY –de la que Serbia es heredera- de haber violado la Convención para la Prevención y el Castigo del Crimen de Genocidio en su territorio entre 1991 y 1995.
Croacia acusó a Serbia de “limpieza étnica” de los croatas en la localidad de Knin, el este y oeste de Eslavonia y en Dalmacia y de la destrucción de innumerables propiedades, por lo que exigió el pago de una indemnización.
En respuesta, Belgrado acusó a Croacia de violar las convenciones internacionales durante la llamada “Operación Tormenta” de 1995, con el fin de destruir al grupo étnico serbio en Croacia, especialmente en la localidad de Krajina.
Después de más de 15 años de investigaciones, el máximo tribunal de la ONU determinó que las fuerzas serbias cometieron crímenes generalizados en Croacia en los primeros años de la guerra, pero no al nivel de considerarlo genocidio.
“Croacia tampoco cometió genocidio durante su campaña militar de 1995 para recuperar territorio en manos de rebeldes serbios”, destacó el fallo del panel de la Corte, integrado por 17 jueces, según una declaración de la CIJ, difundida en su página en internet.
No obstante, el dictamen de la CIJ, que es definitivo y legalmente vinculante, subrayó la “responsabilidad” de los dos países por “por no prevenir el genocidio” en la antigua Yugoslavia.
“La Corte encuentra condiciones de genocidio en algunos pero no en todos los casos analizados y presentados en el caso que enfrenta a Croacia y Serbia” en relación con los acontecimientos acaecidos entre 1991 y 1995, durante la guerra que dividió a Yugoslavia”, agregó Tomka.
El magistrado insistió en que pese “al gran número de muertes cometidas” durante ese conflicto, la Corte no podía concluir que realmente hubo un genocidio e instó a ambas partes a colaborar en la identificación de las personas que aún están desaparecidas.
“La corte anima a las partes a continuar su cooperación con la vista puesta en ofrecer una reparación adecuada a las víctimas de esas violaciones, consolidando así la paz y la estabilidad en la región”, concluyó el presidente de la CJI.
En un fallo anterior de 2007 en un caso presentado por Bosnia, la CIJ determinó también que Serbia no era responsable de genocidio, pero que se había violado la Convención sobre el Genocidio al no impedir la masacre de Srebrenica.