Naciones Unidas.- El Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) se sumó hoy a la condena del secretario general, Ban Ki-moon, a los atentados en Túnez, Kuwait y Francia, que causaron la muerte de al menos 54 personas.
En un comunicado, el Consejo de Seguridad extendió sus condolencias a las familias de las víctimas, a los gobiernos de los países donde ocurrieron los ataques y a todos aquellas naciones cuyos ciudadanos hayan sido afectados.
Los miembros del Consejo, además, subrayaron “la necesidad de llevar a los responsables de estos condenables actos de terrorismo ante la justicia”.
Reiteraron también la convicción de este organismo de combatir las amenazas a la paz y la seguridad internacional en todas sus formas, y recordaron que el terrorismo es siempre injustificable, sin importar sus motivaciones o quiénes lo cometan.
El ataque en el centro turístico de Susa, en Túnez, causó al menos la muerte de 28 personas, así como más de 30 heridos. Ocurrió cuando dos hombres armados entraron en dos hoteles y abrieron fuego indiscriminado contra los parroquianos.
En Kuwait, un suicida entró a una mezquita chiíta de la capital durante la oración del mediodía del viernes y detonó la carga que portaba, causando la muerte de 25 personas e hiriendo a más de 200. El atentado fue reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico (EI).
El tercer ataque sucedió en una fábrica en el sureste de Francia, cerca de la ciudad de Lyon, donde un hombre fue decapitado y su cabeza colgada a la entrada de la planta. Además, los agresores provocaron una explosión que dejó varios heridos al estrellar un vehículo contra un depósito de gas.
Al respecto, Ban Ki-moon indicó que “estos ataques atroces fortalecerán el compromiso de las Naciones Unidas de ayudar a derrotar a quienes buscan asesinar, destruir y aniquilar el desarrollo humano y la cultura”.
Expresó además su solidaridad con las familias de las víctimas y con los gobiernos tunecino, kuwaití y francés.
Por su parte, el presidente de la Asamblea General de la ONU, Sam Kutesa, resaltó que “esta implacable ola de ataques terroristas” resalta la necesidad de los Estados miembros para “combatir el extremismo violento y la intolerancia”.