Washington.- La Casa Blanca afirmó hoy que la lentitud en las negociaciones con Cuba para la apertura de sus respectivas embajadas es un reflejo natural del proceso para revertir décadas de desconfianza entre ambas naciones.
“El presidente entiende que cuando se tiene un país que ha estado marginado por Estados Unidos durante cinco décadas, va a tomar un poco de tiempo restablecer alguna confianza para logra estos acuerdos”, dijo el vocero presidencial Josh Earnest.
Cuando anunció en noviembre pasado el restablecimiento de relaciones con Cuba, el mandatario indicó que una de las primeras acciones sería la reapertura de las respectivas representaciones diplomáticas en Washington y La Habana.
Sin embargo, tres meses después del inicio de las pláticas, que comenzaron en enero pasado, no hay una fecha precisa para este anuncio.
En las mesas de diálogo sostenidas, Cuba ha insistido en que antes de ese paso, Estados Unidos debe retirarla de la lista de países promotores del terrorismo.
Earnest desestimó que esta espera pueda interpretarse como un síntoma de dificultades.
“Si consideramos los últimos 50 años de la historia entre nuestros países, tres meses no parece un espera muy larga”, indicó.
Sobre la inclusión de Cuba en la lista de países promotores del terrorismo, Earnest dijo que no es un secreto que el tema “es una prioridad para los cubanos y es algo sobre lo que estamos trabajando activamente”.
Cuestionado sobre la posibilidad de que Obama sostenga un encuentro con el presidente cubano Raúl Castro en el marco de la Cumbre de Las Américas en Panamá, Earnest dijo que la Casa Blanca aún trabaja en afinar la agenda del mandatario para ese encuentro de dos días.