El Cártel de Sinaloa es uno de los tres grupos de la delincuencia organizada transnacionales que operan en Ecuador y tiene presencia en ese país sudamericano desde el 2003, es decir, hace más de 20 años, de acuerdo con un informe de la Dirección Antinarcóticos de la Policía Nacional ecuatoriana.
El pasado 31 de julio, el candidato presidencial de esa nación, Fernando Villavicencio – ejecutado este miércoles en Quito con disparos de arma de fuego, al salir de un acto de campaña -, denunció públicamente amenazas de muerte por un líder de dicho cártel mexicano.
El documento señala que el Cártel de Sinaloa – uno de los más poderosos de todo el mundo –, a través de sus “emisarios o representantes” coordina la salida de drogas a través de aeronaves, lanchas rápidas o “Go Fast”, desde las costas ecuatorianas, con destino a Centroamérica y Norteamérica.
“Para esta actividad ilícita, el cártel realiza alianzas con diversas organizaciones que conozcan el territorio y mar ecuatoriano para servir como enclaves en el transporte y salida de droga entre Colombia y los mercados de consumo de cocaína. La especialización logística ejecutada desde inicios de siglo, la posiciona como una de las organizaciones con mayor capacidad de distribución de drogas ilícitas a nivel mundial”, destaca el informe.
El informe – también elaborado por el Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado (OECO) – resalta que, mediante diversas acciones de investigación realizadas por la Dirección Nacional de Investigación Antidrogas, se ha evidenciado la presencia de integrantes del Cártel de Sinaloa en las siguientes subzonas de Ecuador: Sucumbíos, Pichincha, Manabí, Los Ríos, Guayas y Santa Elena.
El estudio señala que este cártel mexicano tomó importancia en el país sudamericano después de 2009, y a lo largo de los años ha construido diversas alianzas con organizaciones criminales ecuatorianas como Los Choneros.
“Específicamente, el Cártel de Sinaloa tomó relevancia en el Ecuador por la detención del ex capitán de inteligencia del Ejército, Telmo Remigio Castro en 2009, quien inició su alianza con la organización mediante la facilitación del transporte de cocaína producida en Colombia para Centroamérica y México.
“La ampliación de sus operaciones logísticas que incluyó la contaminación de contenedores y alianzas con organizaciones locales como Los Choneros, se mantuvo hasta su asesinato en diciembre de 2019 en la Cárcel Regional de Guayaquil. A partir de este hecho Sánchez W. El Gato y Montenegro C. pasaron a liderar la red y ampliar sus actividades a la producción de drogas ilícitas mediante laboratorios de conversión en el Ecuador”, resalta.
El documento agrega que, en la actualidad, El Gato es considerado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos como uno de los principales narcotraficantes del mundo, por su contribución con los principales cárteles mexicanos para traficar cocaína a territorio norteamericano.
Consultado por MILENIO sobre el tema, el ex ministro de Defensa de Ecuador, Ricardo Patiño, expuso que la presencia de cárteles mexicanos en ese país sudamericano, se asentó hace aproximadamente cuatro años.
“Se sabía de la existencia de cárteles mexicanos, pero no tenían una presencia importante, contundente en el Ecuador. El Ecuador, seguramente usted lo sabrá también, ha sido un país tradicionalmente no productor de drogas. Sí era un país por donde, tanto la droga que se producía en Colombia como en Perú, transitaba, especialmente incluso a través de, algunos casos vía terrestre o vía marítima, para dirigirse por el océano pacífico hacia los Estados Unidos, pero no éramos un país productor de drogas ni tampoco procesador de drogas”, destacó.
El ex titular del Ministerio de Defensa durante el gobierno de Rafael Correa, alertó que en Ecuador, los cárteles internacionales (como Sinaloa o Jalisco Nueva Generación), se han infiltrado en las instituciones del estado.
“Ahora evidentemente los cárteles han tomado un control lamentablemente de los aparatos del estado, lamentablemente de los aparatos policiales, y militares. El propio gobierno de los Estados Unidos ha denunciado que hay narco generales en el Ecuador, hace pocos meses atrás les ha quitado las visas, que eso es para los Estados Unidos es como condenar a una persona”, aseguró.
Ricardo Patiño, quien también fue ministro de Relaciones Exteriores, consideró que Ecuador vive una crisis de violencia e inseguridad nunca antes vista, tras el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio.
“Estamos en una situación terrorífica, nunca antes en el Ecuador esto había sucedido. Allá no conocíamos de las extorsiones, de las llamadas vacunas, no sabíamos, en el Ecuador no existían, y comenzó a existir recién en el gobierno de Lasso, pero eso no existía en el Ecuador, no pasaba. No pasaba tampoco que se mataran como el estilo del sicariato, personas a diestra y siniestra todos los días. Tampoco conocíamos del asesinato de políticos. Usted podrá sorprenderse de lo que le estoy diciendo, el último asesinato de un político que yo me acuerde fue hace 30 años”, añadió.
(milenio.com)