Mogadiscio.- La detonación de una bomba a control remoto mató hoy a siete trabajadores de Naciones Unidas que laboraban en Somalia, en el occidente de África, informaron fuentes de seguridad.
El atentado fue reivindicado por el grupo militante Al-shabab a través de su vocero Abulaziz Abu Musáb, quien dijo a la cadena qatarí de noticias Al Yazira que el ataque había estado dirigido contra su enemigo Naciones Unidas.
La bomba se encontraba, de acuerdo a las primeras investigaciones, bajo el asiento del autobús de Naciones Unidas que transportaba personal en la ciudad de Garowe, capital de la región de Puntland, en el extremo oeste del país.
De los muertos cuatro eran trabajadores extranjeros, señalaron fuentes somalíes de seguridad.
Nick Kay, representante de la Secretaría General de Naciones Unidas en el país africano, condenó en su cuenta de Twitter el atentado y la pérdida de vidas humanas.