Dallas.- La policía de la ciudad de Waco, Texas, arrestó a unos 170 miembros de pandillas de motociclistas, sospechosos de estar relacionados con el tiroteo que provocó la muerte de nueve personas y 18 lesionados.
El sargento W. Patrick Swanton, vocero del Departamento de Policía de Waco, informó que los sospechosos son procesados en la cárcel del condado de McLenna.
Indicó que los detenidos serán acusados de participar en crimen organizado, aunque los procuradores e investigadores podrían optar por formular también otros cargos, incluyendo asesinato.
El tiroteo se suscitó poco después del medio día de este domingo, cuando integrantes de unas cinco pandillas diferentes de motociclistas se reunieron dentro y fuera del restaurante Twin Peaks en Waco.
La policía se encontraba en el lugar, antes de comenzar el conflicto, al anticiparse que la reunión en ese lugar podría desatar problemas de violencia.
Las autoridades exhortaron a los administradores del restaurante Twin Peaks a no celebrar días o eventos especiales dedicados a atraer a miembros de las pandillas de motociclistas a su establecimiento.
La policía señaló que durante meses trato de evitar situaciones de peligro en el establecimiento, solicitando aumentar la seguridad en el interior y se le negara el servicio a las pandillas; sin embargo, de acuerdo con las autoridades, los administradores del restaurante se negaron a cooperar.
Swanton dijo que la Comisión de Bebidas Alcohólicas de Texas (TABC) ordenó una “suspensión sumaria” del restaurante durante la próxima semana.
Aseguró que el cierre no constituye una acción punitiva por parte de la TABC, sino que se ordena “ante el peligro constante que representa para nuestra comunidad”.
Existe “una razón suficiente para creer que se producirá más violencia allí, si hubiera sido autorizados a permanecer abierto durante el próximo periodo de siete días”, refirió Swanton.
Las autoridades realizan una investigación paralela sobre el restaurante y podrían decretarse otras medidas, indicó.
La policía también emitió advertencias de recibir información creíble acerca de amenazas hacia sus agentes”, manifestó.
El periódico The Dallas Morning News publicó una fotografía de un boletín interno enviado a los policías de Waco la noche del domingo en el que se lee: “Nuestra corporación ha recibido información de que (las pandillas de) los Cosaks y Banditos han emitido una orden de matar a cualquiera en uniforme”.
La fotografía, que muestra el mensaje en la computadora de una patrulla de la policía, fue publicada también en el sitio de internet sobre noticias de la policía “GoHeroes.us”.
De acuerdo con la policía las pandillas involucradas en el tiroteo son conocidas de estar relacionadas con actividades delictivas, incluyendo tráfico de drogas, extorsión, robo y violencia.
Swanton dijo que la policía estaba consciente de que las pandillas se reunían en el lugar para atender asuntos relacionados al reclutamiento y áreas de influencia, aspectos de choque entre los diferentes grupos.
La mañana del domingo, antes de que se suscitara el tiroteo, al menos 10 agentes del equipo de armas especiales SWAT de la policía de Waco y del Departamento de Seguridad Pública de Texas, se encontraban dentro de patrullas en el estacionamiento del restaurante.
Sin embargo, ningún agente de la policía estaba dentro del establecimiento, porque sentían que no eran bien recibidos ahí por los administradores del restaurante, manifestó Swanton.