El Comité Nacional del PAN tendrá hoy una reunión fundamental en el proceso de selección de su candidato presidencial.
La idea es que haya consenso entre los tres aspirantes, Santiago Creel, Josefina Vázquez Mota y Ernesto Cordero para adelantar la elección, programada para el cinco de febrero.
La razón es sencilla: una vez que el Instituto Federal Electoral (IFE) autorizó a los precandidatos únicos realizar mítines, asambleas o como quiera llamarles, la supuesta ventaja que tenían los precandidatos panistas –hacer campaña interna-, se fue a la basura, desapareció.
Porque para efectos prácticos, tanto Andrés Manuel López Obrador como Enrique Peña Nieto están haciendo campaña, aunque aseguren que no llaman a votar por su partido o coalición, pero es campaña.
Perdido pues el incentivo que tenía el proceso interno del PAN, el tiempo ahora juega en su contra: entre más tiempo dejen correr para la elección de su candidato, mayor es la ventaja que conceden.
Por eso, ninguno de los tres precandidatos está en contra de adelantar el proceso.
Lo que sí protestó Creel, con razón, fue la intención de aplicar una “encuesta indicativa” con la que se pretendía bajar a uno de los precandidatos; Creel entendió que sería él, aunque en las encuestas serias quien sigue figurando en el tercer sitio es Cordero.
Como sea, hoy el PAN le puede ganar tiempo al tiempo, o seguir apostando a un proceso caduco y sin ningún incentivo.
Además no será la primera vez que se adelante el proceso; este fue pasado del 19 de febrero al cinco del mismo mes.
Mañana miércoles se abre el registro para los precandidatos del PRD que quieren competir por la jefatura de Gobierno de la capital.
El registro estará abierto del 4 al 8 de enero próximos y las encuestas que decidirán el nombre del candidato se levantarán los días 14 y 15 de este mes; el resultado se conocerá una semana después.
Entre los más considerados en las encuestas están Alejandra Barrales, el procurador Miguel Mancera, el senador Carlos Navarrete, el secretario de Educación Mario Delgado, el ex secretario de Desarrollo Social, Martí Batres, entre otros.
Son 10 los apuntados pero solo uno será el elegido.
Lo que no se ha establecido a la fecha son los premios de consolación para quienes participen y no ganen pero tampoco hagan “panchos”, como dicen en el PRD.
Murió Gonzalo Miguel Rivas Cámara, el empleado de la gasolinera Eva II, en Chilpancingo, que el 12 de diciembre pasado evitó que los psedoestudiantes de la normal rural de Ayotzinapa incendiaran la estación.
Rivas Cámara pagó con su vida la decisión de correr a cerrar la bombas que alimentaban los despachadores de gasolina y que, de haber estallado, hubieran causado una tragedia mayor.
Lo malo para el trabajador, considerado ya un héroe local, es que no “era estudiante, abnegado, cuasi mártir, reprimido por una estúpida autoridad” y por lo tanto ningún “político progresista” reclama el esclarecimiento de su muerte, aunque sepan quiénes provocaron el incendio.