Aunque le parezca extraño, los priístas de Chiapas no quieren ver por su territorio al precandidato presidencial número uno, Enrique Peña Nieto, porque, dicen, perjudicará al partido.
La historia es la siguiente.
Perdido el gobierno del estado por dos sexenios consecutivos, las dos veces ante un candidato aliancista-, los priístas han sido ninguneados y en ocasiones perseguidos.
Ello ha provocado que el priísmo duro se radicalice y construya escenarios que le permitan recuperar el poder.
Los priístas creen que tienen enormes posibilidades de recuperar el gobierno de Chiapas el próximo año y para ello se han preparado al menos tres gallos de buen nivel: la senadora María Elena Orantes, José Antonio Aguilar Bodegas y Sami David David, estos dos últimos ya fueron candidatos a gobernador hace seis y 12 años, respectivamente.
Peeroooo, el caso es que otro senador, el verde ecologista Manuel Velasco Coello, también quiere la gubernatura y para ello se ha trabajado a su “compadre’’ –al menos así se llaman en privado-, el gobernador Juan Sabines.
A ciencia cierta no se sabe si Sabines, que suele cambiar de preferencias como de zapatos, respaldará las aspiraciones de su compadre, pero un hecho ha llamado la atención de los priístas chiapanecos.
Hoy, Velasco Coello rendirá su informe de labores –es un decir, claro-, ante un auditorio numeroso y cuyo invitado principal es Peña Nieto.
El priísmo local publicó una carta enviada al exgobernador del estado de México, que durante su mandato no se apersonó en Chiapas, en la que le pidieron que no acudiera al evento, para evitar que su presencia fuera tomada como un espaldarazo a las ambiciones de Velasco Coello.
Y es que en Chiapas no solo los priístas sino una buena parte de la clase política local de distintos partidos no ven en el joven senador a un político confiable; al parecer solo el gobernador.
Como sea, hoy se sabrá si Peña Nieto atendió la petición o no.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación emitirá en breve una resolución acerca del Decreto Presidencial del llamado “apagón digital” que, por lo que se sabe, será un revés contra el Ejecutivo.
Si las informaciones previas sobre el asunto que apuntan una derrota del Ejecutivo en la Corte se confirman, habrá que preguntar qué sucederá con el Consejero Jurídico de la Presidencia, Miguel Alessio Robles, que en eso de asesorar al Presidente no las trae todas consigo.
Alessio Robles fue el redactor del Decreto Presidencial bajo la lupa de la SCJN que podría ser invalidado por violar la Ley de Telecomunicaciones y precedentes de la Corte.
El argumento de Alessio Robles a favor del Decreto es que el Congreso, que fue quien lo impugnó, carece de legitimidad para inconformarse sobre el tema.
Y para reforzar al equipo, el Consejero Jurídico se hizo de los servicios del exsecretario de Gobernación Fernando Gómez Mont. A ver si así.
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