
La Cámara de Representantes de Estados Unidos, de mayoría republicana, adoptó este martes un proyecto de ley presupuestal para evitar una parálisis financiera del gobierno.
El texto, aprobado por 217 votos a favor y 213 en contra, pasará ahora al Senado, donde deberá ser adoptado antes del viernes a la medianoche, cuando vence el actual presupuesto federal.
Solo un demócrata, Jared Golden, se pronunció a favor de la misma, mientras que el republicano Thomas Massie fue el único de su partido que votó en contra.
La resolución diseñada por el liderazgo republicano busca financiar al Ejecutivo hasta el 30 de septiembre, con una ligera reducción de la financiación del año pasado, pero con un aumento del gasto militar de 6 mil millones de dólares y de 485 millones para el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Republicanos unidos tras presión de Trump
Trump ha estado presionando a sus correligionarios republicanos para que se alineen y el vicepresidente JD Vance les instó a mantenerse unidos en la reunión a puerta cerrada este martes por la mañana.
No obstante, al menos tres legisladores republicanos dijeron después que seguían indecisos, ya que el proyecto de ley no recorta el gasto tanto como les gustaría.
“No creo que hayamos hecho nuestro trabajo esta vez”, dijo el republicano Rich McCormick.
Aún así, los líderes republicanos predijeron que tendrían éxito.
“Tendremos los votos”, dijo el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, en rueda de prensa.
La vocera de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, indicó este martes en una conferencia de prensa que el mandatario había urgido a la validación de esa prórroga para poder seguir trabajando en favor de los estadunidenses.
“Trump ha dejado muy claro que cree que es fundamental que francamente todos los miembros del Congreso respalden esta resolución para mantener el financiamiento del gobierno”, dijo la representante presidencial, según la cual “votar en contra dañará al pueblo estadunidense y acabará con el increíble impulso” que el mandatario “ha generado en los últimos 51 días”.
La legislación también tendrá que ser aprobada en el Senado para garantizar que las agencias gubernamentales puedan seguir funcionando después de la medianoche del viernes, cuando expira la financiación.
¿Cuáles serían las consecuencias del cierre?
Los republicanos de esa cámara necesitaban que al menos siete demócratas votaran a su favor para evitar una interrupción de la financiación, que podría afectar a todo tipo de actividades, desde la supervisión financiera a la investigación científica, y obligar a cientos de miles de trabajadores federales a quedarse sin sueldo.
En diciembre, bajo el mandato del demócrata Joe Biden, el Congreso aprobó ‘in extremis’ una extensión del presupuesto hasta este 14 de marzo, con el voto a favor de demócratas y republicanos, a pesar de que Trump, entonces presidente electo, lo había intentado boicotear.
Un cierre de la Administración federal por falta de fondos puede dejar a cientos de miles de trabajadores públicos sin salario, agencias operando bajo servicios mínimos y la clausura de museos y parques nacionales.
(milenio.com)