Durante una breve reunión diplomática en el marco de la toma de posesión del presidente de Perú, Pedro Castillo, el ex presidente de Bolivia, Evo Morales, reconoció al canciller, Marcelo Ebrard, como quien le salvó la vida.
—”Canciller, salvador de mi vida”, dijo Morales mientras ambos se ponían de pie para saludarse ante la prensa.
—Amigo, amigo, ¡Amigo querido!, respondió Ebrard mientras le extendió un abrazo.
—”Y México, nunca voy a olvidar eso”, completó el histórico líder boliviano.
—” No, qué bueno que pudimos llegar ese día”, reviró Ebrard en referencia al avión de la Fuerza Aérea Mexicana que voló hasta Bolivia en noviembre de 2019 para brindarle asilo durante un tiempo a Morales en el país.
El diálogo entre Ebrard y Morales se da luego de que este domingo MILENIO dio conocer una entrevista con el actual canciller de Bolivia, Rogelio Mayta, donde, precisamente, se enfatiza la labor de la diplomacia mexicana para evitar un magnicidio durante las revueltas sociales que tuvieron parte en Bolivia, a finales de 2019, en medio de acusaciones de fraude electoral contra el ex presidente.
“Porque la mano de México, o sea el actuar de México, (respecto) al presidente Morales al resguardarle, primero que ha salvado su vida y la vida de su comitiva. “Segundo, que si se hubiese cometido ese magnicidio, si la gente llena de odio, de prejuicios, hubiese llegado a consumar ese hecho, el impacto de la sociedad boliviana hubiese sido muchísimo mayor.
“Si hubiera vivido una situación de muerte de importantes líderes como el Presidente, el vicepresidente, la situación en la que podía haberse dado ese asesinato, porque no iba a ser de otra forma, probablemente la reacción de estos sectores populares iba hacer muchísima más dura todavía”, dijo Mayta durante la entrevista.
El canciller boliviano le confió a MILENIO que, en su opinión, si la oposición que derivó en un gobierno de facto tras la renuncia de Morales “cometían la imprudencia de asesinar al presidente (Morales) ese golpe de Estado no hubiese triunfado.
Hubiese sido aplastado por la movilización popular. Habría costado cientos, tal vez miles, de vidas. Eso se evitó y finalmente pudimos reencauzar a través de una salida democrática: una elección. Que como ya había ocurrido en 2019 en 2020 le dio la preferencia electoral al Movimiento al Socialismo (partido fundado por Evo Morales)”.
(milenio.com)