Hace unos días, el príncipe Harry, nieto de la reina Isabel II, y su esposa Meghan Markle, perdieron sus últimos títulos oficiales tras haber confirmado a la soberana su retirada definitiva de la familia real británica. Ahora, la realeza vuelve a estar en la mira.
La razón es porque un familiar de la monarca de Inglaterra fue condenado este martes a 10 meses de prisión por una agresión sexual contra una mujer en su castillo familiar en Escocia. Simon Bowes-Lyon, conde de Strathmore, había admitido dicha agresión en un dormitorio de su Castillo de Glamis en febrero de 2020.
The Earl of Strathmore and Kinghorne, Simon Bowes-Lyon, a great-great nephew of the late Queen Elizabeth, the Queen Mother, has been jailed for ten months over a sex attack on a guest at his ancestral home of Glamis Castle https://t.co/7uadGdgWlQ
— The Times (@thetimes) February 23, 2021
Cinco años de prisión
Bowes-Lyon, de 34 años, que es primo tercero de la reina, se declaró culpable el mes pasado, diciendo que estaba muy avergonzado de sus acciones. Aunque al principio de su declaración le echó la culpa al alcohol, pues la noche de la agresión bebió en exceso, al final aceptó que eso no es excusa para haber cometido el delito.
“Estoy muy avergonzado de mis acciones que han causado tanta angustia a una invitada en mi casa. Claramente, había bebido en exceso la noche del incidente. Como alguien que es muy consciente del daño que puede causar el alcohol, debería haberlo sabido mejor. Reconozco, en cualquier caso, que el alcohol no es excusa para mi comportamiento. No pensé que fuera capaz de comportarme como lo hice, pero he tenido que afrontarlo y asumir la responsabilidad”, dijo.
El hombre fue condenado el martes en la Corte Regional de Dundee y se enfrenta a hasta cinco años de cárcel por el delito.
(milenio.com)