El Airbus A380 de Air France, considerado el avión más grande del mundo, aterrizará en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) en el primer trimestre del próximo año, una vez cumplidas las gestiones y adecuaciones necesarias para su operación en la terminal aérea.
Lo anterior, debido a la firma de un convenio con la aerolínea y la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) en el marco de la visita de Estado que realiza el presidente Enrique Peña Nieto a Francia.
En el evento estuvieron presentes los presidentes de México, Enrique Peña Nieto, y Francois Hollande de Francia, así como el titular de la DGAC, Gilberto López Meyer y el presidente de Air France, Frédéric Gagey.
“Con este acuerdo se inicia una nueva época en el desarrollo de la aviación mexicana y convierte al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México en el primer destino de Latinoamérica en contar con operaciones regulares de esta gran aeronave”, dijo la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) en un comunicado.
En días previos, el director de la aerolínea en México, Eric Caron, adelantó que el aterrizaje de la aeronave sería en enero del próximo año, y que el tema se abordaría durante la visita del mandatario mexicano a Francia.
“Trabajamos con los autoridades mexicanas para recibir el gigante aéreo con los dos pisos, estamos platicado porque el aeropuerto no está totalmente listo, necesitan adaptar la infraestructura pero esperamos concluir las discusiones y tener un compromiso a finales del año”.
Las adaptaciones, que se requieren para el A380 son tener un doble pasillo para abordar, así como en las pistas y en este sentido, reafirmó que las discusiones en este tema son positivas.
“Podemos concluir con un anuncio en las próximas semanas de que el aeropuerto va a invertir para que esté listo en diciembre”, expuso en su momento.
El A380 necesita un espacio de 80 por 80 metros para circular, por lo que la modificación sería en las calles de rodaje, sobre todo en las curvas que necesitarán pavimentación en los laterales debido a que dicho avión tiene los motores más separados –a diferencia del B747- y necesita rodar sobre suelo asfaltado.
Actualmente, Air France conecta dichos países a través de su Boeing 747 configurado con dos clases, sin embargo, con el cambio de avión se incrementaría su capacidad.
En su momento, autoridades del AICM comentaron que se requiere una inversión de 27 millones de dólares, para ampliar las pistas del aeropuerto capitalino, actualmente el único aeropuerto capaz de recibirlo es el de Cancún.