La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) reconoce los avances de México para reducir a la mitad la proporción de la población subalimentada, afirmó Fernando Soto Baquero, representante de dicha organización en México.
En el seminario “El derecho a la alimentación y la seguridad alimentaria en México”, Soto Baquero destacó a las autoridades por reconocer que parte de la población tiene problemas alimentarios, lo que, consideró, representa por sí solo la mitad de la solución.
Recordó que en México la pequeña agricultura familiar aporta 39 por ciento de la producción agropecuaria, pero genera casi 60 por ciento de los empleos y tiene una gran diversidad.
“Por eso los pobres tienen activos, un pedazo de tierra y posibilidades de resolver con dignidad sus problemas de acceso a la alimentación, con las oportunidades que les brinden las políticas públicas.”
En instalaciones del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), el representante del organismo internacional expuso que la FAO resaltó la participación social y la coordinación interinstitucional e intergubernamental para enfrentar el problema a través de la Cruzada Nacional contra el Hambre.
Las políticas públicas del país en la materia tienen desafíos en la coordinación intersectorial, los modelos de operación de las políticas públicas y las tareas de vigilancia y monitoreo, enfatizó.
Soto Baquero participó en la mesa “Distintas formas de medir el acceso al derecho a la alimentación” junto al secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), Gonzalo Hernández Licona.
También estuvo presente Teresa Shamah Levy, directora de Vigilancia de la Nutrición del Centro de Investigación en Nutrición y Salud del Instituto Nacional de Salud Pública, entre otros.