Miami.- La ciudadana mexicana Carmen Cadena fue sentenciada hoy a cinco años de cárcel por su papel en una red de prostitución que representó uno de los capítulos más “brutales” de explotación sexual en Estados Unidos, dijeron autoridades.
Cadena, de 48 años, fue sentenciada por el juez federal estadunidense José E. Martínez, del Distrito Sur de Florida, informó el Departamento de Justicia.
Cadena se declaró culpable el pasado 26 de enero de conspiración criminal para traer mujeres mexicanas indocumentadas, algunas de sólo 14 años, a Estados Unidos, con falsas promesas de empleo.
Los miembros de la familia Cadena utilizaban luego la fuerza, agresiones sexuales y amenazas de dañar a las víctimas y sus familias para obligarlas a ejercer la prostitución en Florida.
Las mujeres trabajan hasta 12 horas al día, y seis días a la semana, y entregaban sus ingresos a los acusados con el fin de pagar presuntas deudas impuestas por haberlas traído a Estados Unidos.
Cuando las víctimas intentaban huir, los miembros de la organización las buscaban y las sometían a palizas y violaciones, señaló el Departamento de Justicia.
Carmen fue extraditada en diciembre de 2014.
La justicia estadunidense ha acusado a 16 miembros de la organización desde 1998, y ha condenado a otros cinco, incluido el esposo de Carmen, Juan Luis Cadena Sosa, quien se declaró culpable en 2008 y recibió una pena de 15 años de prisión.
Un tío de la acusada, Rogerio Cadena, se declaró culpable en 1999 y recibió una pena de 15 años, y tres cuñados: Abel recibió 24 años en México, y Hugo y Rafael sendas condenas a 15 años en Florida.
Otros seis acusados se declararon culpables en el caso y uno de ellos fue sentenciado en una corte estatal por el asesinato de una persona a las afueras del burdel de los Cadena.
“La sentencia de hoy marca la culminación de nuestra larga lucha por la justicia en los últimos 16 años de las mujeres y las niñas cuyas vidas fueron destrozadas por las violaciones que sufrieron a manos de sus traficantes”, dijo Vanita Gupta, asistente de la División de Derechos Civiles de la fiscalía.
“Esta investigación puso fin a una organización familiar de tráfico sexual brutal y ayudó a crear conciencia sobre la trata de personas y la servidumbre involuntaria en forma de prostitución forzada”, dijo George L. Piro, agente especial de la oficina del FBI en Miami.