Cancún.- Cancún cumple 45 años como un destino sólido, consolidado pero sobre todo renovado que enfrenta el reto de mantener su calidad de servicios, preparación humana y una ciudad acorde a la modernidad de su zona hotelera.
El presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún y Puerto Morelos, Carlos Gosselin Maurel, sostuvo que Cancún es un destino joven en servicios e infraestructura, pero también en proceso de maduración, aunque también con otros signos de deterioro.
“No podemos decir que Cancún es un destino cansado ni mucho menos, hay nuevas inversiones, fuentes de trabajo, se ofrece un servicio de primera calidad, quizá tengamos edificios abandonados, que se van a la quiebra porque no alcanzan sus objetivos, pero no es algo generalizado”, aseveró.
Señaló que la clave del éxito de Cancún en sus primeros 45 años de existencia tiene que ver con la capacidad de “reinventarse” para superar todo tipo de obstáculos y retos como el paso de dos de los huracanes más devastadores como Gilberto y Wilma.
“Estamos hablando de un destino, de una ciudad que se ha levantado prácticamente de cero en tres ocasiones. La primera cuando empezó su desarrollo y las otras dos tras el paso de dos fenómenos meteorológicos poderosos”, afirmó.
Precisó que se percibe un cambio total, de un lugar donde se empezó de cero, con pocos servicios, con pocos habitantes y ahora se tiene una zona hotelera de calidad mundial y prácticamente un millón de habitantes, así como la visita en un año de 15 millones de turistas.
Explicó que los retos de Cancún a partir de los 45 años que empezó su desarrollo tienen que ver con la labor de empresarios, la reconstrucción de la zona hotelera, dotar su infraestructura con la mejor y más avanzada tecnología.
Al destino le hace falta que lleguen más turistas, dijo, pero que tengan más tiempo para visitar la zona, que hayan más espacios en los vuelos y que el desarrollo se dé con armonía, particularmente en el tramo conocido como “la milla de oro” en Puerto Morelos, donde se esperan levantar hasta 14 mil habitaciones.
“Entre esos factores de apoyo, sería maravilloso facilitar las condiciones de ingreso al país, de los turistas de Estados Unidos y Canadá, eliminar trabas, también le daría un impulso importante”, agregó.
Gosselin Maurel consideró que también se debe revisar el alcance y las adecuaciones a las leyes y políticas de “cielos abiertos”.
“Todo eso nos permitiría dar ese brinco de los 29 millones de turistas que llegan ahora a 40 millones de visitantes a México”, aseveró.
En el marco del 45 aniversario del inicio de la construcción de la zona hotelera y la ciudad de Cancún, sostuvo que se trata de un destino que cuenta con una gran calidad, con instalaciones e infraestructura de punta, con establecimientos contemporáneos.
Indicó que el éxito de Cancún radica en el espíritu de solidaridad de sus habitantes, de sus desarrolladores, de los empresarios, pero sobre todo porque pese a todo se mantiene una filosofía de unidad.
En ese sentido, destacó que es preciso mantener esa unidad, autoridades, empresarios, sindicatos, actores políticos y sociedad para evitar que la fragmentación, los conflictos de interés, afecten al destino como ha pasado en otras partes del país.
De igual forma, consideró necesario el desarrollo de colaboradores de carrera, especialistas en atención de servicios exclusivos de la hotelería, que no se tienen como por ejemplo, amas de llaves, de encargados de mantenimiento, de amenidades.
“Estamos en un lugar de privilegio, pero no podemos dormirnos en nuestros laureles, son los primeros 45 años, queremos que sean más y que sea como un destino de alta calidad”, insistió.
De acuerdo con el más reciente reporte de la Secretaría de Turismo del Estado de Quintana Roo, en la zona de playas de Cancún operan 145 hoteles con 30 mil 780, cuartos, mientras que en Puerto Morelos, seis mil 749 cuartos en 46 centro de hospedaje y en el centro de la ciudad la cifra es de cinco mil 500 cuartos en 30 alojamientos.