Washington.- Legisladores estadunidenses regañaron hoy a la directora de la agencia antidrogas estadunidense DEA, Michelle Leonhart, por la conducta de sus agentes que contrataron prostitutas en Colombia y por no haber despedido a los infractores.
Leonhart compareció ante el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, luego que un reporte oficial documentó que agentes de la DEA participaron en fiestas sexuales con prostitutas, que fueron pagadas por narcotraficantes colombianos.
“Estoy muy decepcionada”, dijo Leonhart en medio del fuego cruzado no sólo de legisladores republicanos sino también de demócratas.
El reporte de la Oficina del Inspector General (OIG) del Departamento de Justicia indicó que los agentes recibieron “dinero, regalos costosos y armas de miembros de los cárteles de las drogas”, según un recuento hecho por un “agente policial extranjero”.
“Siete de los 10 agentes admitieron haber asistido a fiestas con prostitutas mientras estaban asignados. La DEA impuso castigos de dos a 10 días de suspensión. Uno de los agentes fue exonerado de cualquier conducta impropia”, señaló la OIG.
El presidente del panel, el republicano Jason Chaffetz, reclamó a Leonhart que ninguno de los agentes involucrados fuera despedido.
“Un agente de la DEA en Bogotá fue acusado de agredir físicamente a una prostituta por una disputa de pagos. Un agente de seguridad fue testigo de que el agente (acusado) lanzó un vaso de vidrio y golpeó a la mujer”, relató el legislador.
“¿Sabe cuál fue el castigo para este agente? 14 días sin goce de sueldo. Vacaciones por dos semanas. Es una vergüenza que no haya despedido a ese agente, que no haya revocado su acceso de seguridad”, remató Chaffetz.
Leonhart se defendió bajo el argumento de que no está a cargo de las medidas disciplinarias contra los agentes, ya que éstas son reguladas por un estatuto interno de la agencia federal.
“Usted está protegiendo a la gente que solicitó prostitutas, que tuvo 15 o 20 fiesta sexuales (…) y usó dinero de los contribuyentes para hacerlo y yo creo que comprometieron la seguridad nacional”, le reprochó el demócrata Stephen Lynch.
“Me ofende mucho que se diga que los protejo”, reviró la directora de la DEA.
La audiencia en torno al reporte sobre “El Manejo de Hostigamiento Sexual y Acusaciones de Mala Conducta por los Elementos Policiales del Departamento de Justicia” ocurrió en medio de la atención nacional en escándalos dentro de agencias estadunidenses.
El caso se suma a uno similar de agentes del Servicio Secreto que forman parte del equipo de seguridad del presidente Barack Obama y quienes contrataron a un grupo de sexoservidoras durante la Cumbre de las Américas en 2012.
De acuerdo con el informe del OIG, el caso de los agentes de la DEA incluyó la admisión por parte de dos agentes que asistían con regularidad en Colombia a establecimientos donde les facilitaban encuentros sexuales con mujeres locales.
Un inspector de la DEA justificó los actos bajo el argumento de que, en Colombia, la prostitución es considerada parte de la “cultura local” y legal en ciertas “zonas de tolerancia”, según el reporte de la OIG.
“De acuerdo con el inspector (de la DEA), es común que las prostitutas estén presentes en reuniones de negocios que incluyen a miembros de los cárteles y policías extranjeros”, añadió.
No obstante, el inspector de la DEA reconoció que los agentes de la DEA requieren un mejor entrenamiento para familiarizarse con el hecho de que tal tipo de conducta es prohibida por la agencia.