Buenos Aires.- La cancillería argentina citó hoy al embajador de Reino Unido, John Freeman, para reclamarle las labores de espionaje y la creciente militarización de las Islas Malvinas.
Argentina respondió así al citatorio que su embajadora Alicia Castro tuvo que cumplir la víspera en Londres, luego que fue citada por el Foreign Office en Londres para explicar las críticas de la presidenta Cristina Fernández contra Reino Unido.
La cancillería explicó en un comunicado que el vicecanciller, Eduardo Zuain, convocó al embajador británico para exigirle explicaciones ante el silencio de su gobierno frente a revelaciones de Edward Snowden.
El ex empleado de la CIA reveló que Reino Unido realizó acciones de espionaje electrónico masivo dirigidas contra Argentina ante la creciente presión internacional para resolver la disputa de soberanía sobre las Malvinas.
“Zuain hizo presente al representante británico que acciones de ese tipo violan el derecho a la privacidad conforme establecido en las resoluciones 68/167 y 69/166 de la Asamblea General de las Naciones Unidas”, explicó el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Agregó que ambas resoluciones ponen de relieve que el espionaje denunciado “al constituir actos de intrusión grave, violan los derechos a la privacidad y a la libertad de expresión y pueden ser contrarios a los preceptos de una sociedad democrática”.
La tensión entre ambos países se renovó el mes pasado, cuando Reino Unido reconoció que reforzará su presencia militar en las Islas, lo que fue impugnado y cuestionado por Argentina, que reclama soberanía sobre Malvinas.
El secretario de Defensa británico, Michael Fallon, informó a la Cámara de los Comunes que se enviarían más tropas y armamento a Malvinas para reforzar el equipo de mil 200 personas, entre civiles y militares, que están destinadas en la base de las Islas.
En medio del creciente cruce de acusaciones, el gobierno argentino denunció penalmente este jueves a las empresas que llevan adelante actividades de exploración de hidrocarburos en la plataforma continental argentina sin tener la autorización correspondiente.
Las empresas imputadas son Rockhopper Exploration plc, Premier Oil plc, Falkland Oil And Gas Limited, Noble Energy Inc. y Edison International SpA, que integran un consorcio responsable de la contratación de la plataforma semi sumergible Eirik Raude.
Dicha plataforma inició el pasado 6 de marzo una campaña exploratoria en la cuenca Malvinas Norte, a unos 200 kilómetros de las Islas Malvinas, durante la que prevé perforar al menos seis pozos a lo largo de un período estimado de 240-260 días.