Bruselas.- Una nueva protesta contra la política de austeridad del gobierno belga reunió hoy en las calles de Bruselas entre 3.5 mil personas, de acuerdo con la policía, y siete mil, según los sindicatos.
La manifestación marca el inicio de una nueva serie de acciones sindicales, que desde mediados de noviembre de 2014 sacuden al país en intermitencia.
Los sindicalistas se movilizarán el miércoles en Lieja, Namur y Charleroi, y amenazan con una huelga general a mediados de abril.
“No abandonaremos el combate. Sin solución, huelga general”, gritaban los manifestantes.
El frente sindical común acusa al primer ministro, Charles Michel, de poner en marcha medidas de “regresión social”, con la connivencia de las patronales.
“Es un combate difícil. Nos enfrentamos a un proyecto construido y pensado de disminución de todas las protecciones sociales”, afirmó Philippe Van Muylder, secretario general del sindicato FGTB.
Una de las principales quejas se refiere a la suspensión del reajuste automático de los salarios.
Los sindicatos afirman que la medida resultará para los trabajadores en una pérdida de 20 mil euros en toda su carrera laboral, lo que equivale a seis meses de trabajo impagado.