Washington.- Una avalancha de compradores de boletos de lotería en 44 estados de los Estados Unidos disparó el premio mayor del llamado Powerball hasta los 500 millones de dólares, uno de los más altos de la historia.
Miles de personas hacían filas en los centros de venta de boletos, usualmente en tiendas de abarrotes o licorerías, para probar su suerte adivinando los cinco números ganadores más el comodín, a pesar de que la probabilidad de triunfo es de 1 en 175 millones.
James Crimonn, un policía del Distrito de Columbia, escogió meticulosamente sus números favoritos y no dudó lo que haría si gana el premio mayor.
“Viajaría, ayudaría a mi familia, a las personas sin hogar, cosas así”, dijo a Notimex.
El ganador tiene la opción de pedir el pago del premio a lo largo de 20 años o en un sola entrega en efectivo, en cuyo caso recibirá unos 337 millones de dólares.
Para ganar el mayor premio del año y el quinto más alto en la historia de la lotería de los Estados Unidos, se requiere atinarle a cinco números y un comodín.
David, un oficinista de Washington que nunca juega la lotería, decidió acudir con sus compañeros de trabajo.
“La primera cosa que me compraría sería un automóvil Audi. ¡Eso es!”, exclamó entre risas.
En 2013 Pedro Quezada, un inmigrante dominicano de 44 años de edad, fue el ganador del premio mayor del Powerball, que tuvo una bolsa de 338 millones de dólares, la cuarta más alta en la historia de Estados Unidos.
Quezada compró el boleto ganador en la vinatería Eagle Liquors, en Passaic, Nueva Jersey, a donde decenas de hispanos acudieron este martes a comprar sus boletos para contagiarse de la suerte.
Además de los 44 estados del país, el Powerball puede jugarse en la capital del país, el Distrito de Columbia, en las Islas Vírgenes y en Puerto Rico.
Cada boleto tiene un costo de dos dólares y los ganadores serán anunciados el miércoles por la noche. La mayor bolsa de Powerball ha sido de casi 600 millones de dólares.