El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó por unanimidad la clasificación de gastos de precampaña y obtención de apoyo ciudadano para los aspirantes a candidatos independientes, para el proceso electoral en marcha.
En sesión extraordinaria, el pleno determinó que toda la información de ingresos y gastos deberá subirse a un sistema de contabilidad provisional, habilitado por el instituto en tanto se habilita la aplicación informática que le posibilite cumplir oportunamente sus atribuciones en materia de fiscalización.
El consejero Ciro Murayama indicó que el denominado “aplicativo informático al que se refiere el presente acuerdo, que permitirá que los políticos informen al INE el detalle de sus operaciones en las precampañas que están en curso, representa una medida de carácter extraordinaria, excepcional”.
Esta acción, sin duda, “es necesaria para enfrentar el incumplimiento al contrato en el que incurrió la empresa Scytl con respecto a la entrega del sistema de contabilidad en línea sin poner en riesgo nuestra obligación de fiscalizar”.
Los gastos de precampaña para los aspirantes a candidatos independientes se dividirán en tres rubros: gastos de propaganda, esto es lo relativo a bardas, mantas, volantes, pancartas, equipos de sonido, actividades políticas, propaganda utilitaria y otros similares.
Los gastos operativos consisten en sueldos y salarios del personal eventual, el arrendamiento eventual de bienes muebles e inmuebles, transporte de material y personal, viáticos y otros similares.
En tanto que los gastos de propaganda se refieren a diarios, revistas y otros medios de comunicación impresos, es decir, aquellos realizados en cualquiera de ellos como inserciones pagadas, anuncios publicitarios y sus similares enfocados a obtener el apoyo ciudadano.
El consejero Benito Nacif mencionó que para que se pueda llevar a cabo una fiscalización adecuada, se requieren además de los insumos correctos, información homogénea y oportuna sobre las operaciones de los partidos políticos.
Los actores políticos deberán registrar sus operaciones, de tal modo que se permita al INE fiscalizar los ingresos y gastos derivados de las precampañas y las actividades de obtención del voto ciudadano, agregó Nacif Hernández.
El documento aprobado por el Consejo precisa que los precandidatos de partidos y candidatos independientes no podrán recibir recursos para financiar sus precampañas que provengan de ministros de culto, empresas, personas que vivan o trabajen en el extranjero, sindicatos, organismos internacionales ni entidades del gobierno.
En el caso de los precandidatos únicos, tienen prohibido realizar actos para promover su imagen o mensaje ante los ciudadanos o votantes, pues incurrirían en una violación a la ley, al tener una ventaja indebida ante el resto de quienes si están compitiendo por la candidatura.
El Consejo General celebró después una segunda sesión extraordinaria en que fue modificado el Reglamento de Sesiones y funcionamiento de las Comisiones de Vigilancia sobre la periodicidad de las sesiones, que se llevarán a cabo una vez al mes durante los procesos electorales.